Magia de Luna

Esa noche comencé mirando hacia el negro cielo, la luna brillaba como nunca antes la había visto y estaba acompañada de algunas estrellas a su alrededor. Sentía que dos de esas estrellas eran tus ojos vigilándome para que esa noche mis sueños fueran hermosos. Todo estaba en silencio, de vez en cuando la brisa soplaba haciendo mover mi cabello y algunas hojas de los árboles que se encontraban allí cerca.

La energía que emanaba la luna y las estrellas me hipnotizaron por un momento, de repente poco a poco el nivel de felicidad en el corazón fue aumentando; inmediatamente pensé en ti y una enorme sonrisa se dibujó en mi rostro. Ese brillo, esa magia que la luna estaba irradiando era muy parecida a la tuya, podía ver reflejados mis sueños allí. ¿Será por eso que a veces me gusta buscar a la luna en el cielo de día? ¿Será por eso que siento que tu esencia es mágica?

Alguien pasó caminando por un lado y se burló al verme mirando hacia el cielo, me parece increíble que aún haya personas que no sepan apreciar las cosas maravillosas de la vida: respirar, observar, sentir, tocar…

Una estrella fugaz hizo que apartara por un momento mi mirada de la luna, ¡Más alegría para mi corazón! Ya sabes cuál fue mi deseo, ¿Cierto?

Sonreí, volví mi mirada hacia la luna y pensé: Seguiremos bajo el mismo cielo pero en diferentes lugares, sólo por un tiempo.