Héroe de Carboncillo
1. INT.ATARDECER.APARTAMENTO DE MIGUEL.COCINA
En la cocina de un apartamento pequeño, con poca entrada de
luz y pocas pertenencias a sus alrededores, se encuentra
ISABEL, la madre de Miguel, de unos 33 años de edad, piel
morena, cabello corto color negro, viste camisa, pantalón
jean y sandalias bajas. En la nevera un montón de facturas
se encuentran pegadas con imanes. Isabel lava los platos
sucios acumulados mientras intenta calmar a su hija pequeña
de 2 años de edad llamada EVA, que llora desconsoladamente
sentada en una pequeña mesa.
ISABEL
(Tararea)
Los pollitos dicen...
laralaralara...cuando tienen
hambre... laralaralara
En ese momento llega MIGUEL, un niño delgado de 10 años de
edad, piel morena, cabello lacio color negro, viste
franelilla blanca, bermudas y zapatos deportivos
desgastados; pone una bolsa de pan en la mesa y se acerca a
su hermanita para acariciarla.
ISABEL
(Cansada)
¡¿Por qué tardaste tanto Miguel?!
Mientras se seca las manos en un paño, toma los panes y
comienza a colocarlos en tres platos al lado de tazones de
sopa. Miguel en silencio toma un pedazo de pan, se lo da a
Eva y ésta inmediatamente se calma mientras lo mastica. Se
sientan alrededor de la pequeña mesa y comienzan a comer,
todos mastican en silencio.
ISABEL
(Suspira)
¿Estás molesto? Sólo será por un
tiempo corto...(Pausa)Buscaré otro
trabajo para las tardes y así...
MIGUEL
(Interrumpe)
Yo también puedo trabajar. (Pausa)
Quiero hacerlo.
ISABEL
(Inquieta)
Yo... quisiera que las cosas fueran
diferentes, pero...
MIGUEL
(Decidido)
Te ayudaré, no te preocupes.
Enseguida bebe el último sorbo de sopa y guarda el pedazo de
pan en la bolsa. Isabel recoge los platos y comienza a
lavarlos en silencio dejando caer varias lágrimas. Miguel
baja a Eva de la silla y se retiran juntos.
2. INT.NOCHE.APARTAMENTO DE MIGUEL.CUARTO
En un cuarto pequeño iluminado por una vela y por una luz de
la calle que entra por la ventana, hay dos camas pequeñas,
ropas en un pequeño aerocloset y algunos juguetes regados
por el piso; Eva duerme en una de las camas abrazando un
osito de peluche de color marrón mientras Miguel sentado en
el suelo se apoya en una mesa improvisada de libros y
periódicos viejos. Toma su lápiz y comienza a sacarle punta.
A su alrededor se encuentran varias hojas sueltas de
cuadernos, otras tantas con algunos dibujos estilo
historietas y un pedazo de borrador viejo. Miguel con
cuidado y en silencio atrae a su lado la vela encendida que
está en la esquina cerca de su cama y se dispone a ordenar
las hojas, escoge una de ellas que se encuentra aún sin
terminar, toma el lápiz y comienza a dibujar con una sonrisa
en su rostro. Luego de un par de horas cuando la vela está a
punto de apagarse, Miguel bosteza ordenando las hojas, pone
el lápiz con cuidado encima de ellas y se acuesta mirando
hacia la ventana. La vela se apaga.
3. EXT.DÍA.PLAZA.CALLE
El señor JUAN, de unos 70 años, piel blanca, cabello gris y
de estatura baja, dueño del kiosco de la esquina conversa
con el distribuidor de periódicos y revistas mientras le
entrega algunos lotes. Miguel los observa desde el otro
extremo de la plaza y al ver que el distribuidor se monta en
el camión y se va, él se acerca hasta el kiosco.
MIGUEL
(Esperanzado)
Buenos días señor. (Pausa)
Disculpe, de casualidad ¿Necesita a
alguien que lo ayude?
El señor Juan lo mira un poco desconfiado y antes de
contestarle, Miguel saca su lápiz mediano del bolsillo del
pantalón y se lo enseña.
MIGUEL
(Resignado)
Éste es el último lápiz que me
queda, mi madre me ha dicho que
deje de ir a la escuela por un
tiempo porque no tenemos suficiente
dinero (Pausa) y yo he decidido que
le ayudaría trabajando.
SEÑOR JUAN
(Tose)
¿Sabes que puedo meterme en
problemas si te doy trabajo? ¡Aún
eres un niño!
MIGUEL
(Pensativo)
¡Puede decir que soy su nieto y que
estoy de vacaciones!
SEÑOR JUAN
(Sonríe)
Y a todas estas ¿Qué tiene que ver
ese lápiz con todo esto?
MIGUEL
(Explica)
Lo más parecido a la escuela que me
queda son mis dibujos de
historietas y para continuar
haciéndolos necesito más lápices.
Miguel saca de su pequeño bolso algunas hojas dibujadas la
noche anterior y se las muestra al señor Juan que suspira
conmovido al verlas.
MIGUEL
(Suspira)
Puedo dejar de ir a la escuela,
puedo ayudar a mi madre con los
gastos de la casa, ¡Pero no puedo
dejar de dibujar!
El señor Juan pone su mano encima del hombro de Miguel.
SEÑOR JUAN
(Sonríe)
Mete tus cosas al kiosco y ayuda a
tu abuelo a organizar estas
revistas.
El señor Juan le guiña un ojo y Miguel emocionado obedece a
sus órdenes rápidamente.
4. INT.NOCHE.APARTAMENTO DE MIGUEL.COCINA
Miguel dibuja concentrado sus caricaturas en la pequeña mesa
de la cocina. Isabel entra en silencio, toma un delantal que
se encuentra guindado a un lado en la pared, observa a
Miguel y curiosa se sienta a su lado mientras revisa algunas
de las hojas que ya están terminadas.
ISABEL
(Sonríe)
Este personaje se parece mucho a
ti...
Miguel le sonríe y sigue dibujando.
ISABEL
(Curiosa)
¿Por qué te gusta tanto dibujar?
Miguel deja de dibujar y pensativo mira a Isabel.
MIGUEL
(Suspira)
A veces a uno no le gusta la
realidad, por eso decidí imaginar y
crear otra...
Isabel muda, asiente, sonríe y le da un beso en la frente a
Miguel. Miguel toma su pequeño lápiz de nuevo y continúa
dibujando.
EVA
(O.C)
¡Mamá!
Isabel suspira, se levanta de la mesa y sale de la cocina.
5. EXT.DÍA.PLAZA.CALLE
Una semana después, dos señores están comprando frente al
kiosco y Miguel los atiende dándole un par de periódicos a
cada uno, sonriente les cobra y le entrega el dinero al
señor Juan que se encuentra sentado organizando unos
billetes y monedas. Cuando se van los clientes, se acerca un
JOVEN alto que lleva en sus manos varios volantes
publicitarios; le entrega uno al señor Juan y conversan
entre ellos, se escucha mucho ruido de los autos, motos y
transeúntes que conversan entre ellos. Miguel decide tomar
sus hojas, lápiz y comienza a dibujar; cuando el Joven se
va, el señor Juan emocionado se acerca a Miguel y le entrega
el papel.
SEÑOR JUAN
¡Mira, es un concurso de
historietas! ¡Es una gran
oportunidad!
MIGUEL
(Nervioso)
Pero... (Pausa)
Miguel abre su mano y observa a su pequeño lápiz.
SEÑOR JUAN
(Interrumpe)
¡No te preocupes!
El señor Juan se acerca al Kiosco y saca un lápiz nuevo de
una vieja caja, se lo entrega a Miguel.
SEÑOR JUAN
(Suspira)
Era una sorpresa... luego te
compraré más para que no gastes de
tu paga.
Miguel con su nuevo lápiz en mano abraza fuertemente al
señor Juan.
MIGUEL
(Contento)
¡Muchas gracias señor Juan!
En ese momento llega el camión del distribuidor de
periódicos y revistas, se baja el CHOFER y llama con un
silbido a Miguel que inmediatamente responde al llamado
cruzando la calle para ayudar a bajar la mercancía. Cuando
Miguel decide cruzar de regreso hasta el kiosco con un lote
de periódicos montado en su hombro aparece una moto y lo
sorprende tumbándolo, su mano derecha se dobla cuando cae,
los periódicos salen volando y el poco tránsito se detiene
para mirar. El señor Juan inmediatamente cruza la calle y lo
ayuda a levantarse, junto con el MOTORIZADO lo llevan hasta
el kiosco. El chofer del camión distribuidor recoge los
periódicos regados y se acerca también hasta el kiosco.
SEÑOR JUAN
(Preocupado)
¡¿Estás bien?! ¡¿Dónde te duele?!
MOTORIZADO
(Nervioso)
Los siento chamo, no te vi... Pero,
¿Estás bien, verdad? Menos mal que
no venía tan rápido.
El señor Juan y el chofer del camión distribuidor lo miran
desafiantes, el señor Juan molesto se le acerca al
motorizado pero Miguel interviene.
MIGUEL
(Nervioso)
Sí... estoy bien.
Miguel con ojos llorosos se revisa los brazos, piernas y se
comienza a limpiar el pantalón y la franela. El motorizado
busca en sus bolsillos, saca un par de billetes de 100 y se
los entrega a Miguel, al mismo tiempo el señor Juan le busca
un pote de agua del kiosco y se lo da, Miguel toma los
billetes sin mirar al motorizado y luego toma el pote de
agua, lo abre tembloroso y toma un par de sorbos.
MOTORIZADO
(Apurado)
Bueno chamo, me tengo que ir.
¡Cuidate!
El motorizado sube a su moto y se va rápidamente.
CHOFER
Señor Juan, yo también tengo que
seguir... Si quiere atienda al niño
y yo paso otro día para cuadrar lo
de las revistas.
El señor Juan aún nervioso se despide del chofer, éste le
hace un cariño en la cabeza a Miguel y cruza la calle.
SEÑOR JUAN
(Preocupado)
¿Estás seguro que no te duele nada?
MIGUEL
(Suspira)
No. Estoy bien...
El señor Juan suspira.
MIGUEL
(Inquieto)
Pero... esto aquí me duele mucho.
Miguel se toca la muñeca de la mano derecha y el señor Juan
se acerca para verla y tocarla.
SEÑOR JUAN
(Decidido)
Cierro el Kiosco y nos vamos al
médico...
El señor Juan comienza a guardar las cosas dentro del kiosco
y Miguel con rostro preocupado comienza a guardar sus cosas
dentro de su bolso, suspira cuando ve el volante del
concurso de historietas, lo mete en el bolso. Cuando
terminan ambos se van caminando hasta cruzar la esquina.
6. INT.NOCHE.APARTAMENTO DE MIGUEL.CUARTO
Miguel se encuentra acostado, en su mano derecha lleva un
yeso y con la otra mano sostiene el volante del concurso de
historietas, después de observarlo por algunos minutos deja
escapar una lágrima, suspira y cierra los ojos. A un lado de
su cama se encuentran sus dibujos y encima de ellos su lápiz
nuevo junto al pequeño.
7. EXT.DÍA.PLAZA.CALLE
Miguel se encuentra sentado a un lado del kiosco con un par
de hojas encima de una carpeta encima de sus piernas
mientras intenta dibujar con su mano izquierda. El señor
Juan se queda observando a Miguel un rato hasta que ve que
después de varios intentos, tira el lápiz y las hojas.
SEÑOR JUAN
(Sonríe)
¡Epa! Sin malcriadeces.
El señor Juan recoge el lápiz, las hojas y se las estrega a
Miguel nuevamente.
SEÑOR JUAN
(Cariñoso)
Todavía puedes hacerlo, quedan
pocos días ¡Sigue intentándolo!
Miguel frustrado suspira, vuelve a tomar las hojas, el lápiz
e intenta una vez más dibujar con su mano izquierda.
8. EXT.DÍA.PREMIACIÓN DEL CONCURSO DE HISTORIETAS.PARQUE
Unas 20 personas aproximadamente entre adultos, jóvenes y
niños se encuentran sentadas frente a una pequeña tarima;
globos y algunas flores de varios colores adornan los
alrededores, se escucha una música de fondo y a lo lejos un
par de niños juegan en los columpios, otro par de niños en
el sube y baja y uno más en el tobogán. A un lado cerca de
un árbol se encuentran sentados el señor Juan, Isabel que
lleva en sus piernas a Eva y Miguel que nervioso se seca el
sudor de sus manos del pantalón. El PRESENTADOR del evento,
de unos 35 años, estatura baja, viste ropa casual colorida,
sube a la tarima y toma el micrófono, cesa la música. El
jurado conformado por UNA MUJER y DOS HOMBRES, vestidos de
forma casual, conversan entre ellos sentados a un lado de la
tarima y ordenan las diferentes historietas de los
concursantes.
PRESENTADOR
(Sonríe)
¡Buenos días! Vamos a comenzar con
la premiación de nuestro primer
concurso "Héroes de Carboncillo".
Todas las personas aplauden. Miguel mira expectante y
nervioso hacia el jurado, la mujer se acerca hasta el
presentador y le entrega un papel con los resultados.
PRESENTADOR
(Carismático)
El premio del primer lugar (Pausa)
va para... ¡José Hernández!
JOSÉ, un adolescente de 16 años, alto, delgado, viste ropa
deportiva se levanta y sube a la tarima. Todos aplauden.
Miguel suspira mientras Isabel lo rodea con su brazo
animándolo, el señor Juan no aplaude y mira con ojos
molestos hacia el jurado. Después de entregarle el diploma y
una medalla a José, el presentador continúa.
PRESENTADOR
(Sonríe)
Ahora vamos con el segundo lugar...
por favor un aplauso para (Pausa)
Miguel cruza los dedos, Isabel lo abraza aún más fuerte y el
señor Juan cierra los ojos.
PRESENTADOR
(Continúa)
¡Daniela Díaz!
Miguel vuelve a suspirar resignado. DANIELA, una niña de 12
años, cabello largo y recogido con una cola, viste un
vestido floral, sube a la tarima y recibe de mano del
presentador su medalla y diploma. Daniela se une a José a un
lado de la tarima junto con el jurado, todos aplauden.
Miguel le susurra algo a su madre con rostro triste pero
ella le contesta con una sonrisa y lo toma de la mano
fuertemente.
PRESENTADOR
(Sonríe)
Y el tercer lugar, pero no menos
importante (Pausa) va para la
historieta de (Pausa)
El señor Juan e Isabel no disimulan su angustia. Miguel
cierra sus ojos fuertemente.
PRESENTADOR
(Continúa)
¡Gabriel López!
Todos aplauden mientras GABRIEL de 17 años, cabello corto,
estatura alta y contextura gruesa, sube a la tarima. Miguel
abre los ojos, afligido mira hacia la tarima y luego voltea
a ver a Isabel, a Eva y al señor Juan que inmediatamente se
levantan de sus asientos y se acercan a Miguel para
abrazarlo.
9. EXT.DÍA.PARQUE
Miguel y Eva ríen mientras Isabel los mece en los columpios.
El señor Juan se acerca con dos algodones de azúcar e
inmediatamente Miguel y Eva se bajan, toman sus algodones y
comienzan a comer.
MIGUEL
(V.O)
Tal vez no sea un héroe...
Miguel arranca un pedazo y se lo da al señor Juan. Isabel
muerde del algodón de Eva y ésta comienza a llorar. Todos
ríen mientras caminan hacia la salida del parque.
MIGUEL
(V.O)
Pero nunca dejaré de ayudar a mi
gente...
Miguel se detiene en uno de los kioscos y observa algunas
historietas en venta, suspira y al darse cuenta de que se
Isabel, Eva y el señor Juan se alejan, corre hasta
alcanzarlos.
MIGUEL
(V.O)
y nunca dejaré de soñar otras
realidades.
NOTA:Guión ganador en el I Concurso Nacional de Nuevos Guionistas
de la Escuela Nacional de Cine, Caracas, Venezuela.
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